La Oratorio de San Benito, citado por primera vez en la visita pastoral de 1823, fue realizado durante el curso del 1700. Propiedad de la iglesia homónima veneciana, fue posteriormente agregado a la iglesia de S. Lucía hasta que fue comprado por la familia Schiesari en 1887. Luego pasó a los Capuzzo y hoy a la “Sociedad agrícola nueva cesetta”.
La inscripción grabada en el portal recuerda que el oratorio está dedicado a San Benito. En el interior se encuentra un grupo de estatuas datable entre 1750-1760, obra del taller de Giovan Maria Morlaiter que representa a San Benito flanqueado por dos putti en el acto de sostener los signos episcopales.
La estructura ha sufrido en tiempos recientes diversas intervenciones para evitar colapsos y daños debido a infiltraciones de agua. El edificio es privado y visible desde el exterior. Anualmente se abre a la ciudadanía con ocasión de la fiesta de San Benito.