La logia, erigida en 1524, se concibió como un escenario permanente de teatro clásico, realizado en piedra de Nanto y provisto de arcadas que reinterpretan la estructura del arco del triunfo romano. En la planta superior pueden verse las estatuas en estuco realizadas por el escultor Jacopo Colonna, colaborador de Jacopo Sansovino. El interior de la logia, decorada al estilo romano alternando frescos y estucos, alberga las alegorías de las cuatro estaciones y de los dioses que dan nombre a los planetas.
El Odeón era el lugar elegido para escuchar música, para el ocio intelectual y para alojar los encuentros de la “Accademia degli Infiammati” (“Academia de los Inflamados”). El edificio, que se caracteriza por un atrio octogonal circundado por vanos laterales dispuestos simétricamente, se convertirá en un prototipo para las villas del Véneto del siglo XVI por su disposición espacial y la lograda relación entre decoración y arquitectura. La bóveda del vano central presenta espléndidas decoraciones grutescas sobre un fondo claro, primer ejemplo en Padua de este motivo que se extendió por Roma y Mantua en la primera mitad del siglo XVI tras el descubrimiento de la Domus Aurea de Nerón. En las salas contiguas se abren paisajes amplios e idealizados atribuidos a Lambert Sustris, artista originario de Ámsterdam que trabajó a partir de la tercera década del siglo XVI en Roma, en Venecia, donde fue alumno de Tiziano, y en Padua. Existe la hipótesis de que los estucos son obra de los hijos de Falconetto y, sobre todo, de Tiziano Minio, escultor paduano activo en el Odeón entre 1534 y 1537.